Alquilar un piso no siempre es sencillo y, a veces, la ilusión inicial puede convertirse en un quebradero de cabeza si surgen problemas. Por este motivo, es importante asesorarse con profesionales y, antes de firmar un contrato de alquilar, tener en cuenta algunas recomendaciones básicas:

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• En la primera visita al que, posiblemente, sea tu futuro hogar, es importante prestar atención a todos los detalles y tener preparado un listado con todas las preguntas que te puedan surgir.

 

• Aunque puedes alquilar un piso de forma particular, siempre es recomendable contactar con profesionales del sector para tener la seguridad de que todo se realizará conforme a la Ley de Arrendamientos Urbanos (LAU).

 

• Antes de firmar un contrato, es importante leer detenidamente todas las clausulas y condiciones para tener-lo todo bien claro antes de firmar. Tómate el tiempo necesario y haz todas las preguntas para conocer bien qué se incluye en el contrato de alquiler.

 

• Es necesario que el piso disponga de certificado energético, cédula de habitabilidad y certificado de instalaciones eléctricas de baja tensión.

 

• En general, siempre se solicita una fianza en el momento de alquilar un piso, que equivale a una mensualidad.

 

• Una vez firmado el contrato, dispones de un mes para revisar que todo esté según lo acordado. Si encuentras algún problema en el mobiliario o instalaciones puedes comunicar-lo al propietario o al profesional inmobiliario que te ha atendido.

 

• Debes saber que es posible rescindir el contrato de alquilar, siempre y cuando lo comuniques al propietario con 30 días de anticipación a la fecha de vencimiento del contrato o de la prórroga.